domingo, 10 de octubre de 2010

Ruedas y neumáticos II. ¿Qué sabemos?



Hola de nuevo!

Sin demora e intentando no dejarme nada en el tintero, continúo con la explicación sobre llantas y neumáticos, donde detallo todo aquello que necesitamos saber para ser todos unos expertos en la materia.

Como ya dije en la otra ocasión, estábamos hablando de los neumáticos y sus características. Vamos pues, ahora, a continuar con lo básico de los neumáticos: La presión, forma y las dimensiones.

La presión de los neumáticos está indicada por el fabricante, dicha presión es calculada bajo unas condiciones de carga variables, así como para un neumático con unas especificaciones concretas, si cambiamos los neumáticos por otros por ejemplo, con un perfil más bajo, de nada sirve seguir las especificaciones del fabricante, ya que este no recomienda dicho neumático y no tiene calculada las presiones concretas. Además el cambio de neumáticos recomendados puede afectar negativamente a otros elementos de la dirección del vehículo, pero eso es algo que trataremos en otra entrega
.
La presión recomendada por el fabricante normalmente viene indicada en el manual de usuario del vehículo, así como en un adhesivo en zonas como el marco interior de la puerta del conducto o en la tapa del depósito de combustible. El fabricante suele indicar dos presiones, una para carga ligera y otra para carga pesada del vehículo, esta última es recomendable siempre que todas las plazas del vehículo sean ocupadas, no necesariamente con carga en el maletero, cuando viajemos dos personas y bastante peso en el maletero también es recomendable hinchar los neumáticos a la presión de carga, cosa que, reconozcámoslo, nadie hace jeje.

Las presiones son indicadas en bares, que es la unidad de medida que se emplea en las presiones. (PSI). Lo normal en los neumáticos que empleamos son 2 bares.


Presión de la rueda de repuesto.

Es curioso a la vez que sorprendente, las ruedas de repuesto (tipo galleta), esas muy estrechas que parecen de motocicleta cuya velocidad máxima recomendada es de 80 Km. /h y que seguro todos conocemos, tienen una presión de inflado de 4 a 4,5 bares de presión, así que si pinchas y sustituyes la rueda por esta de repuesto no olvides hincharla a esta presión (normalmente indicada en la propia goma).


Dimensiones y números en los neumáticos.


Las dimensiones de los neumáticos se representan de la siguiente forma:
205/ 55 / 16 - 91 W

¿Cómo lo interpretamos?:
  • El primer número identifica el ancho de sección (de pared a pared) de la cubierta, expresado en milímetros.
  • El segundo número es el perfil, o altura del lado interior de la cubierta y se expresa en el porcentaje del ancho de cubierta que corresponde al flanco o pared de la cubierta. En algunas cubiertas se prescinde del mismo, considerando que equivale a un perfil 80. (Dato por el cual se encarecen nuestras cubiertas cuando las compramos.)
  • El tercer número es el diámetro de la circunferencia interior del neumático en pulgadas, o también, el diámetro de la llanta sobre la que se monta.
  • El cuarto número indica el índice de carga del neumático. Este índice se rige por unas tablas en que se recogen las equivalencias en Kg. del mismo. En el ejemplo el índice "91" equivale a 615 Kg. por cubierta.
  • Finalmente la letra indica la velocidad máxima a la que el neumático podrá circular sin romperse o averiarse. Cada letra equivale a una velocidad y en el ejemplo el código W supone una velocidad de hasta 270 Km. /h.

Otro de los detalles importantes en un neumático, es el dibujo.

Ojito, aquí ya empiezan a entrar muchos "tuners" en que dibujo está mas guapo y cual no. Pero estrictamente hablando, el dibujo tiene una importancia vital en un neumático.


Importancia del dibujo en la banda de rodadura.

El dibujo del neumático es una de las partes fundamentales del mismo. Según la legislación vigente, la profundidad mínima del dibujo deberá ser de 1,6 mm., aunque todos los fabricantes de neumáticos recomiendan los 3 mm. Como mínimo que garantiza la seguridad del vehículo, y nuestra Guardia Civil (en España) también vela por este cumplimiento...

El dibujo, además de aportar una cierta apariencia distintiva al neumático (es su cara, por llamarlo de alguna manera), cumple también el cometido de transmitir todas las fuerzas ejercidas por el vehículo al suelo (son la suela de los zapatos).
El dibujo es necesario debido a que el neumático se utiliza con climatología cambiante. Para rodar en seco lo mejor son los neumáticos sin dibujo o "slick", que disponen de la máxima superficie de agarre. Sin embargo, estas cubiertas son incapaces de evacuar ni una gota de agua. Por eso, los neumáticos deben llevar ranuras que permitan la expulsión del agua de debajo del mismo, evitando el llamado fenómeno del aquaplaning: el neumático se sube encima de una ola de agua formada frente a él, perdiendo todas sus propiedades de agarre y direccionalidad. La combinación de estas ranuras forman los tacos, que son finalmente los que entran en contacto con la calzada.




Los tipos de dibujos pueden ser:

  • Simétrico. Si se realiza una sección vertical de la banda de rodadura del neumático, el dibujo debería ser simétrico a ambos lados de dicha sección, la mayoría de ellos están destinados a un uso convencional.
  • Direccionales. El dibujo indica la dirección de la marcha, de manera que establece como se montaran las llantas. Por norma general, sus ranuras describen  una forma de V. principalmente son neumáticos deportivos, muy atractivos para el gran público.
  • Asimétrico. Para aumentar el apoyo a alta velocidad, el lado exterior de la cubierta tiene muy poco dibujo, que se concentra en el interior para ofrecer un mayor agarre en condiciones adversas, como con suelo mojado. Son neumáticos deportivos con elevados códigos de velocidad.

Cuidado de los neumáticos.

El neumático constituye el único punto de unión entre el vehículo y el suelo, que se realiza a través de una superficie reducida. Es por tanto responsable de buena parte del comportamiento del automóvil y de su seguridad.
Por eso es conveniente someterlos a ciertos cuidados y revisiones. Como por ejemplo:

  •  Mire el dibujo de la banda de rodadura y compruebe que tiene al menos 1,6 mm de profundidad.
  •  Por el peligro de aquaplanning, es mejor que el dibujo llegue a 3 mm (y de ésto hablo por experiencia.
  •  La vida útil de las marcas y modelos más conocidos oscila entre los 70.000 y los 50.000 kilómetros, pero es más seguro cambiarlos antes. Todo dependerá de lo "killer" que seas.
  •  Los neumáticos envejecen con el paso del tiempo y el contacto con aceites, líquido de freno o carburantes. No los use durante más de cinco años aunque tengan poco kilómetros. Examine los flancos en busca de pequeñas grietas.
  •  Una conducción tranquila alarga la vida de las ruedas. Si es rápida y deportiva se degradan con más rapidez.
  •  Compare las marcas. Hay fabricantes que adaptan los neumáticos al tipo de conducción y por tanto varía su adherencia, comportamiento y duración.
  •  No se fije sólo en el precio; la calidad y las dimensiones no deben pasar a segundo plano; son primordiales si se quiere conducir seguro.
  •  Mida la presión de los neumáticos con cierta frecuencia y siempre en frío (cuando el vehículo lleva estacionado al menos una hora a la sombra). De lo contrario calcule que el manómetro marcará una presión de hasta 0,3 bares (kgs/cm2) más de la real.
  •  Los manómetros de las gasolineras tienen un margen de error, porque sufren las inclemencias del tiempo y de los golpes. En caso de duda, iguale las presiones de un mismo eje, un poco al alza.
  •  Hay una presión para rodar por carretera y otra por autopista y/o a plena carga. Estos datos vienen indicados en el manual de instrucciones de su vehículo. La diferencia puede ser sustancial. Las bajas presiones pueden causar reventones.
  •  No realice frenadas fuertes, porque una zona del neumático puede quedar más desgastada que las demás. Además de producir vibraciones, puede desestabilizar frenadas posteriores y modificar el comportamiento del vehículo en las curvas.
  •  No es conveniente subir las ruedas a los bordillos, ya que el neumático se puede pellizcar. Si no hay más remedio, hágalo muy lentamente.



Equilibrado de ruedas.

Como consecuencia del propio proceso de elaboración de los neumáticos, realizados a partir de la unión de distintas bandas de goma y lona, resulta imposible que la rueda tenga un equilibrio perfecto del peso en todos los puntos de su diámetro. Una pequeña deficiencia que se ve incrementada cuando la rueda se coloca sobre la llanta, al no tener un reparto equilibrado de pesos por todo su contorno. Estos indicadores exigen que el conductor vele por que el equilibrado de sus ruedas se realice una vez al año de manera correcta, ya que las consecuencias de un mal equilibrado pueden ser mortales, afectando al conjunto del vehículo y por tanto a la seguridad de quienes viajan en él. Además, no equilibrar el coche acarrea otros problemas como el desgaste irregular y prematuro de la rueda, hasta el punto de que un neumático que puede durar entre 30.000 y 40.000 kilómetros queda inservible a los 15.000 kilómetros.

Por ello:

  • El equilibrado es un proceso destinado a eliminar las vibraciones que la rueda puede transmitir a la dirección y al volante. Para ello, se colocan unos contrapesos en la llanta para que el rodar sea uniforme en toda la superficie.
  • La alineación, paralelo o geometría es el proceso que  ajusta los elementos de la dirección y la suspensión con el fin de que las ruedas apoyen correctamente sobre la carretera y el orden de marcha sea adecuado. Así mismo, se evita que los neumáticos se desgasten de forma irregular.


Reparación de las ruedas.

Seguramente más de una vez hemos estado en un viaje placentero dentro de nuestro coche hasta que notamos que éste no se desplaza de la misma forma en que lo venía haciendo, en estos casos tenemos dos alternativas: estacionamos el coche y nos fijamos si ocurre algo anormal con el neumático o seguimos nuestro camino hasta que el problema se manifieste de manera más aguda. Lo que un buen servicio mecánico aconseja es optar por la primera alternativa para evitar inconvenientes más complejos luego; es muy probable que un neumático de dañe, es que esta situación la hemos vivido todos los que hemos tenido coches.

Pero lo bueno de este mal trago es que la reparación de neumáticos es bastante sencilla se seguimos los pasos indicados a raja tablas; debemos también señalar que cuando estamos llevando a cabo esta tarea se necesita de mucha concentración y de las herramientas adecuadas. La primera pregunta que suele surgir cuando de reparación de neumáticos se trata, se relaciona con la seguridad; ¿Es seguro reparar un neumático pinchado?. 

Podemos señalar que si éste pierde toda o la mayoría de su presión de aire, debe necesariamente ser removido de la rueda para que luego se realice una inspección interna completa para determinar luego si está dañado. La reparación de neumáticos pinchados es casi imposible, aún si corren distancias pequeñas habitualmente no tienen remedio; sólo el 50% de los pinchazos, cortes de hasta ¼ de pulgada, hoyos de clavos, etc., pueden ser reparados por personal altamente calificado que utiliza tecnología avanzada y métodos apropiados. Se aconseja no realizar la reparación de neumáticos con pinchazos de más de ¼ de pulgada o con pinchazos en las paredes del neumático; tampoco se deben tocar aquellos cuyos ribetes están desgastados más de 1/16 de pulgada de profundidad; en estos casos directamente lo reemplazaremos por el neumático de auxilio. Otro de los problema frecuentes que involucra a estos elementos es la vibración, es aquí en donde tanto los neumáticos como el sistema de suspensión y viraje deben ser revisados para poder determinar qué es lo que ocasiona dicha vibración; si esta tarea no se efectúa puede ocasionar un desgaste excesivo de los neumáticos y de la suspensión.

Y bueno, no se me ocurre nada mas. Hablando con un amigo, me ha hecho una pregunta, sobre, al fin y al cabo tras toda la explicación, como podemos evitar que un neumático se rompa de forma prematura o rápida. Así que añadiré una pequeña anotación final.


Los malos hábitos condicionan la vida útil del neumático

Muchos de los casos de reparación de neumáticos en los talleres mecánicos se debe principalmente a los malos hábitos que los conductores poseen; aunque muchos individuos asuman que la forma de conducir no influye en el desgaste del coche o en sus extremidades, están muy equivocados. Los consejos que se suelen brindar para extender la vida útil del coche y sus neumáticos son simplemente tres:
  •  No conducir al límite de velocidad ya que el calor excesivo genera un desgaste mayor del neumático y reduce su durabilidad (a no ser que estés en ciruito jeje).
  • Evitar las vueltas rápidas en las curvas y esquinas o realizar maniobras como arrancar rápidamente y parar de repente.
  • Y por último, nunca se debe conducir sobre el borde del pavimento ni sobre las cunetas, obstrucciones u hoyos; esta acción también produce un desgaste significativo del neumático. (Eso si, partiendo de la base de la chapuza de algunas carreteras).
Detectar los problemas de desgaste en estos elementos es cuestión de “tacto”; los neumáticos frecuentemente nos otorgan señales de problemas, lo que debemos hacer nosotros es estar atentos a dichas señales de advertencia: cuando el neumático esta desinflado esto quiere decir que existe un desgaste en ambos bordes, si se encuentra sobre inflado, es porque existe un desgaste en el centro.

Y bueno, poco mas que añadir. La verdad que he contado aquí todo lo que se me ocurría, y preguntando a personas qué era lo que les intrigaba, porque, sinceramente, a mi me es imposible caer en todas estas cosas al momento.

Pero bueno, con estas dos entradas, uno adquiere mas seguridad a la hora de comprar ruedas, llantas, o notar cosas extrañas en el coche. Total, si sirve para ahorrarnos unas pelas en llevarlo al taller para el "¿Me puede decir lo que es?". De éste modo, ya lo sabemos nosotros.

Un abrazo chicos, y pronto otra entrada, ¡A ver cuando empezamos a hablar de potencia!.


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